Cada árbol es cuidado y monitoreado para que rinda mangos de la mejor calidad posible. Los mangos se mantienen en el árbol hasta llegar al punto óptimo de maduración para su cosecha. Al momento del corte, la fruta es cuidadosamente arrancada del árbol utilizando una herramienta especial que evita heridas a la fruta.
Cada mango es pre-seleccionado en campo de acuerdo al tamaño y calidad que nos exigen nuestros clientes. Escogemos los mangos con el mejor tamaño y calidad, libres de manchas y otro tipo de daño.